martes, 25 de mayo de 2010

MEJOR EN BICI.


Tengo un trato con mi sobrino, si él cumple su parte, yo cumplo la mía. Así que hemos salido en bici con él porque evidentemente ha cumplido lo acordado.
Este trato, además, a mí me viene como anillo al dedo, porque cuando las circunstancias me impiden salir al monte o largarme al pueblo, al menos me oxigeno un poco alejándome de los escenarios habituales y cargándome las pilas un ratito con los rayos del sol que se cuelan a traves de las hojas del árbol que me cobija.
¿Sabíais que la gente que vive cerca de espacios verdes está más sana mentalmente y vive más años?. Por desgracia, mi ciudad, es bastante precaria en esto, aquí plantan cuatro naranjos bordes y te dicen que es un espacio verde. A mí no me engañan, porque espacios verdes son los que he visto yo en otros países, que los parques parecen bosques, pero es lo que hay, y no me queda otra que conformarme con lo que tengo.

Los niños son auténticos imitadores de los adultos y Dani lleva tiempo deseando poder hacer lo que hacen sus tetes, que es circular con la bici por la ciudad.
Sabeis que la bici es mi medio de transporte, primero porque vivo en La Plana, así que casi sería un pecado no aprovechar tal circunstancia, y después, por todos los demás beneficios que se obtienen del pedaleo, voy, vengo, no contamino, hago ejercicio, me relajo, no tengo problemas de aparcamiento y disfruto del canto de la chicharra, de la brisa, del sol, de la lluvia, de todos los elementos naturales con mucha más intensidad.

Hay un pequeño parque cerca de casa, que todavía no conoce mucha gente, y es ideal para perderse un rato, sentarse, escuchar como cae el agua de la fuente, cargarse de un poco de energía. Como no es un sitio muy frecuentado, es una maravilla disfrutarlo casi para nosotros solos.
Fuimos hasta allí con la bici, abajo podeis verme con la mía, una extensión de mí misma. Este trato es una manera perfecta de cumplir promesas y al mismo tiempo desconectar de la rutina un poco.
El parque no es un bosque, pero es lo que hay en la ciudad, así que ya sabeis, cuando no se pueda ir a disfrutar de la naturaleza, acordaros de que seguro que teneis cerca un rincón con árboles, sombras agradables y fuentes relajantes donde acudir para sentaros y leer un buen libro, pasear o simplemente perderse mentalmente en los Cerros de Úbeda, es gratis y no necesitas desplazarte demasiado lejos, un pequeño placer al alcance de todos.

3 comentarios:

Fran dijo...

Perdona pero en tu ciudad a unos 4km de tu casa tienes la montaña, casi no hace falta un parque para cargar las pilas(aunque opino que tendrian que haber más). No apreciamos lo que tenemos, andando podemos estar en plena naturaleza en menos de 45 min.

Lorena dijo...

Fran: La salida no era para mí, era para un crío y el niño no está acostumbrado, poco a poco y tiempo al tiempo, por eso no hacemos distancias más largas. Sé muy bien lo que tenemos cerca y lejos, lo he pateado todo, pero con el poco tiempo que tenía era la opción más adecuada para ese día.

Lorena dijo...

Fran: El post es un alegato a la necesidad de integrar la ciudad con el entorno que lo rodea, y a los beneficios para la salud que se obtendría de ampliar los espacios verdes donde puedes ir en dos minutos a oxigenarte cuando no tienes tiempo de ir más allá, no sé si se ha comprendido bien. Todos tendríamos que tener sitios así con tan solo bajar a la calle.