martes, 6 de abril de 2010

CEDEIRA(Galicia)



Una casita con encanto.



Con los Ardorines, fotografiados por una papelera rota.



Las barquitas de colores esperando, incansables, su turno para flotar de nuevo sobre las frías aguas del Atlántico.



Una apuesta que perdí, eligió como destino Galicia, y allá que nos fuimos con los Ardorines. Aunque no hubiera perdido, el destino elegido habría sido el mismo, porque ya era hora, y porque sentía que se lo debía a alguién que ya no está y que adoraba esta tierra.

Llegamos cansados tras atravesar España de un lado a otro, pero no lo suficientemente cansados como para quedarnos quietecitos en la preciosa casa donde nos alojamos. Tras una ducha reparadora, salimos disparados camino de Cedeira.

Cedeira es un pueblo costero y su ría es la situada más al norte de las coruñesas. Nos recibió con un temporal de esos de no salir de casa, y así fue como terminamos dando un paseo por el casco antiguo en la más absoluta de las soledades, algo normal teniendo en cuenta que el viento azotaba fuerte combinado con la lluvia, el frío cortaba la piel y un paseo con semejante vendabal no es tarea fácil, más bien es cosa de viajeros osados repletos de curiosidad.

13 comentarios:

belén dijo...

Hola guapísima, veo que ya estáis en casita. Menudo tiempo pillásteis, eso que el día que decidísteis ir a las Fragas creo que os dio un respiro y Lorenzo se asomó tímidamente. Ayer fue la romería de Chamorro y ya hacía años que no recordaba un día así, lució un día espléndido y aprovechamos para acercarnos a la playa de Ponzos, ya sabes paseíto relajante escuchando el batir de las olas, me traje unas cuantas caracolas y piedras pulidas por el oleaje. Sigo aumentando la colección para cuando os decidáis a volver.

BIQUIÑOS PARA TODOS, INCLUIDOS LOS ARDORINES.

Lorena dijo...

Belén: Tuvimos mucha suerte con el tiempo pese a que fue malo, porque llovía cuando estábamos dentro del coche y en las visitas se portaba de maravilla. El día de las Fragas genial, precioso. Conoceros fue un placer, sois encantadores, y atentos que prontito sales en el blog. Muchos besitos y gracias por todo.

fermin dijo...

Eso os pasa por ir siempre en pos del norte. Con lo a gustito que hemos estado en el Mediterráneo.
No hagas caso de lo anterior, en el fondo es pura envidia.
Petons, viajera.

Lorena dijo...

Fermín: Si es que al mí el norte me tiene loquita y al final, mira, a pasar frío, viento, lluvia, granizo y todo lo que haga falta a cambio de un paisaje que no tiene precio. Hermosas sensaciones.

Alejandra dijo...

Tienes toda la razón Lorena, todo lo que haga falta a cambio de un paisaje que no tiene precio. Y es que lo nuestro es amor al Norte, ¿Por qué si no, a quien se le ocurre salir con alerta naranja, más que a nosotros?.
Posdata: muchas gracias Belen por las conchas, ya las tengo situadas junto con las que voy recogiendo en mis otros viajes.

Marisol dijo...

Weeenooooooooooooooooo....que yo también estaba allí con viento, lluvia, granizo y nieve y la alerta esa de colorines!! Yo no tengo palabras...me encanta Galicia y su gente...jejejej y ya hablo gallego y todo. Pena que no supiera que estabamos todos por allí. Besos

Lorena dijo...

Alejandra: Lo de la alerta naranja lo iba a contar hoy. El Norte es lo que tiene,o lo tomas o lo dejas y yo me lo quedo con su clima loco incluido. Besotes.
Marisol: ¿qué me dices?, hay una clara falta de comunicación...cachisssss...

Alicia dijo...

Lorena qué fotos más bonitas. Tengo que ir a Galicia y hacer el Camino de Santiago, debe de ser precioso y la naturaleza impresionante. Besitos

Lorena dijo...

Alicia: Merece la pena la visita. A mí me gustó mucho la gente, tenía una imagen muy diferente de los gallegos y me vine encantada. Besotes!

Ardorín dijo...

Esta visita a Cedeira me ha permitido ver el cambio de una ciudad de invierno a verano. Siempre he viajado a Galicia en verano y las cosas se ven con otros colores, otras maneras y otras gentes.
En esta ocasión no había nadie en las calles, soplaba un vientecillo de narices y se agradecía la ropa de abrigo. La ría estaba casi seca.
En verano todo el mundo estaba en la calle. La plaza donde compramos las golosinas estaba repleta de terrazas al aire libre y habían un montón de nanos disfrutando en la calle. En la ría se bañaban otros muchos y algunos trepaban por las barcas que se encontraban amarradas en el centro de la misma.
Por mi forma de ser prefiero la estampa invernal, a pesar de la climatología, que tampoco era para tanto.

Lorena dijo...

Ardorín: Pues yo del día de Cedeira recuerdo mi dolor de oídos por culpa del viento. No recuerdo ver a nadie bañándose y como tú, sin haber estado en verano, prefiero sin duda el mal tiempo y el invierno, porque los lugares con mucha gente me agobían más que me relajan. Gracias por el comentario, ya puedes votar lo aburrido que son los post, para que no te quejes!!!

Ardorín dijo...

No se bañaba nadie porque mi referencia era del verano. No creo que los post sean aburridos, pero eso ya lo hablamos una vez. Es una ventana abierta al mundo para que quienes no pueden llegar a ese lugar conozcan otros sitios.

Lorena dijo...

Ardorín: Me dijistes que no ponía los chismes eso para votar, ¡y ya están puestos!. Ays, ya decía yo que lo del baño te lo habías sacado de debajo de la manga, jajajajaja