viernes, 28 de octubre de 2011

SIMBIOSIS.


Hay unos ríos maravillosos en la zona de Benasque. Ríos que me dejaban hipnotizada. Con su caudal circulando con fuerza en busca del mar, con sus aguas heladas, transparentes, curativas del alma. Me costaba respirar al tocar con mi cuerpo el agua, pero no me perdí la oportunidad del chapoteo, ¿quién sabe cuando será la próxima?, así que, pasó el tren y subí al vagón del dejarme fluir.

La verdad es que el agua estaba más helada que la de otros ríos que visito a menudo. Era como sumergir los pies en cientos de cubitos de hielo, pero como dice mi profesor de yoga, el agua fría es un anclaje con el presente, así que, no me daba tiempo a descontrolar una cadena de pensamientos, sólo estaba allí, sentada, disfrutando de los rayos del sol, viendo a las lavanderas volar dando saltitos de piedra en piedra, envuelta en la magia de su música hipnotizadora, que todo lo puede, que se amolda, se adapta a las cisrcunstancias y no deja de avanzar buscando su camino. Sentada enmedio, pensaba, que estábamos en simbiosis, me sentía parte de esa comunidad, de esa población de organismos, de seres vivos que habitan ese medio.

Os decía que el agua es muy buena para curar el alma, para arrastrar sedimentos, pero también lo es para los pies hinchados de las embarazadas, así que Ardorina aguantó como una valiente hasta que se le pusieron rojos de tanto frío.

Arriba, el señor de Mordor señalando un punto lejano que resulta ser Pedro, observando aves...y es que, nunca mejor dicho, cada loco con su tema.

¿Y qué hacía Ardorin en estas fotos?, se lo tendríamos que preguntar a él, quizás como el restos, vivir el momento con intensidad, ya os digo yo que el agua obra milagros, y ahí lo tenemos, posando para la fotógrafa y obedeciendo las órdenes de la misma, como debe ser. ¡Muy bien Ardorin!, dejastes de estar encorsetado por unos minutos. Vamos avanzando...

Para finalizar, las dos mozas de cháchara debajo de un puente, recordando así una canción preciosa de Pedro Guerra que habla precisamente de eso, de un río, de un puente, de la gente que vive bajo ese techo cuando no tiene otro al que acudir.

5 comentarios:

carmen dijo...

Como disfrutáis de la naturaleza. Se te ve tan contenta y alegre siempre, que da gusto mirar las fotos para verte.
Besos.

Lorena dijo...

Carmen: Pues no siempre es así, pero es verdad que en ese escenario es más fácil olvidarte de todo disfrutar, ayuda mucho, jajajajaja. Besitos guapa!!

CUKA dijo...

Qué bonito todo! Yo también estuve hace tres semanas en Huesca, por la zona de Ainsa (precioso!), y es que en esta época del año, los Pirineos son GENIALES! (Bueno, y en cualquier momento del año, jejeje)
Un beset

Carina dijo...

Tienes fotos tan maravillosas y bonitas, y el blog muy interesante.

Lorena dijo...

Cuka: Es un sitio al que nunca se duda en regresar y repetir. Ainsa es una pasada, es verdad, precioso. Besets!!!

Carina: ¡Gracias Carina!, ¡bienvenida!, me hace mucha ilusión las nuevas visitas. Un abrazo!