martes, 11 de octubre de 2011

EL RESCATE.


No somos los únicos que viven aventuras, este verano, Pichín se empeñó en vivir nuevas experiencias y la faena fue nuestra para rescatarlo.

Decidimos soltarlo para que corriera en una habitación donde, valoramos, y no encontramos peligro alguno para su vida, pero no pensamos en la estufa, y Pichín se metió ¡dentro de ella!, estuvimos casi una hora tratando de sacarlo de allí.

Al final, con mucha paciencia y con una linterna que nos ayudaba a indicarle el camino de salida, volvimos a tenerlo con nosotros. Estaba un poco asustado pero sano y salvo.
Los que no sabemos si estaremos seguros cuando llegue la hora de encender la estufa somos nosotros, porque tanto rato con Pichín allí dentro deambulando me pregunto si habrá mordido algún cable...todo sea que salgamos volando. Ya veis que el espíritu aventurero reina en esta casa, debe de ser eso de tal palo, tal astilla.

2 comentarios:

carmen dijo...

Pues si ir con cuidado al encender la estufa, pues un poco de precaución nunca está demás. En casa también nos paso una cosa parecida, un conejito que tenía Alicia se comió el cable de unos cuantos aparatos de la casa, pero al final no pasó nada.
Un beso.

Lorena dijo...

Carmen: Ya veremos si no salta la casa por los aires, jajaja, cosas de los animalitos, que no conocen los peligros. Besines Carmen.