jueves, 17 de junio de 2010

UN ÁRBOL CON SOLERA.


¿Qué hago yo subida en los árboles?, supongo que potenciar la vida de la primate que vive en mí, recordando de alguna manera a mis antepasados más ancestrales, o quizás sintiéndome más cercana a mis primos hermanos, a mis semejantes, a los grandes simios como el orangután, los bonobos o los chimpancés que siguen durmiendo en grandes nidos en la copa de los árboles. ¿Alguien se ha preguntado porqué en las casas de dos alturas las habitaciones suelen estar en la parte de arriba?, o, ¿por qué los niños quieren dormir siempre en la cama de arriba en una litera ?, o ¿por qué algunas veces soñamos que nos caemos y despertamos bruscamente?, quizás esto sea una pincelada de lo que fuimos un día, un resquicio de nuestra vida antes de abandonar los árboles. Por si a alguien le interesa el tema, el científico y primatólogo Jordi Sabater Pi, escribió un libro que se llama: "Etología de la vivienda humana. De los nidos de gorilas y chimpancés a la vivienda humana". Aún no lo he leído pero me lo han recomendado, habla sobre todas estas cuestiones.

Este árbol que veis en la foto es centenario. Es un árbol especial para Pedro porque hace unos años este árbol se convirtió en su gimnasio particular. Se trata de una garrofera, o un algarrobo, o una Ceratonia siliqua L.(el nombre científico). Nosotros hemos descubierto hace bien poco los beneficios de consumir cacao de algarroba, que son muchos, así que ahora este árbol cobra un significado diferente, nos transmite una cantidad de información que antes desconocíamos.

Lo de la primate que hay sobre el árbol, tiene mucho que ver con el post que escribiré mañana, en realidad es una pista de lo que he hecho el fin de semana pasado. ¡Qué tengais un buen día!.


4 comentarios:

belén dijo...

Hola, que árbol tan bonito, la última foto parece sacada de un cuento; pero no me imagino a Pedro haciendo gimnasia ahí.Por cierto ahora hace un montón de años que no lo tomo, pero cuando estuve enferma del intestino me recomendaron en un herbolario el cacao de algarroba, hay gente que dice que sabe a rayos pero a mí me sabía a gloria y de hecho me fue muy bien con ella.
Es la primera vez que escucho la similitud de la vida de los gorilas y chímpances con la vivienda humana, podría estar interesante ese libro.

Besos para los dos y recuerdos a los ardorines.

Lorena dijo...

Belén: A mí el sabor del cacao de algarrobo me parece un poco raro pero me gusta, así que poco a poco me iré acostumbrando, digo yo.
En cuanto a los simios, son realmente increibles y cuando empiezas a saber más sobre ellos te das cuenta de que no tenemos tantas diferencias como nos podamos pensar.
Los ardorines no sé si te leeran pero si no te leen ya se los doy yo los recuerdos. Besitos!!

Aniwiki dijo...

No sé porqué será, pero yo también soy de subirme a los árboles, y de dormir siempre en la litera de arriba, y lo de soñar que caemos también me ha pasado. Muy interesante todo lo que cuentas :) Muchas gracias. Lo del cacao de algarroba mi madre también me lo decía, eso de vivir en los pueblos creo que a los niños les ayuda a aprender muchas más cosas que a los niños de ciudad. Eso de estar en el campo, y respirar aire puro es algo genial que no se puede expresar en palabras.
Besiwikis guapa!

Lorena dijo...

Aniwiki: ¡Hola Ana!, a mí también me pasa y bueno, es interesante saber de donde pueden venir todas estas cosas que normalmente no pensamos pero que solemos hacer.
Yo también estoy de acuerdo contigo en que es un lujazo el campo y las sensaciones se escapan a las palabras. Besiwikis!!!