martes, 22 de junio de 2010

PARQUE NATURAL DEL MONTSENY.


El Paque Natural del Montseny fue declarado Reserva de la Biosfera por la Unesco. Es el más antiguo de Cataluña, declarado así en el año 1987, y la verdad es que impresiona mirar al horizonte y que hasta donde llega la vista se observe un inmenso bosque de alcornoques, encinas y pinos. Más de 30.000 Hectáreas de terreno protegido, una esperanza para el futuro, que se cuiden y se mimen estos bosques, que comienzan a ser un excepción, para las gentes del mañana.

Dentro del mismo parque, se pueden encontrar una docena de ermitas románicas. También se encuentra ubicado en su interior, el pequeño pueblecito que da nombre al parque: Montseny.
En la misma entrada del pueblo, hay un parking público donde se deja el coche y partir de ahí, uno ya se puede perder en las encantadoras tiendecitas artesanales que ofrecen durante el fin de semana incluido, sus deliciosos productos. Las personas de la zona son muy amables, no escatiman esfuerzos en hacerte sentir como en casa. La iglesia es pequeña, pero con mucho encanto. Está construida en piedra gris y parece perfectamente diseñada para no desentonar con el paisaje impresionante que rodea a esta pequeña población.

Como es habitual en nosotros, no tardamos demasiado en dejarnos llevar por nuestras almas sedientas del sonido del silencio y de la paz que se encuentra en la naturaleza. Nos gusta perdernos de la multitud, ausentarnos, andar los caminos de tierra que se adentran en el bosque.

Antes de localizar el sitio ideal para hacer un picnic, estuvimos un rato recorriendo varios senderos, algunos discurrían junto a zonas de cultivo, otros se adentraban en zonas intransitables, y otros se escondían entre los alcornoques donde preferíamos no andar pisoteando para evitar destrozar, sin querer, los pequeños árboles que crecían discretamente a ras de la base de los más antiguos.

No es la primera vez que vemos carteles que recalcan la prohibición de coger piñas, algo que garantiza la proliferación de sus semillas. Estas cosas contribuyen al desarrollo de la vida, y estoy de acuerdo con que se deje evolucionar, que la naturaleza siga su curso que es lo normal.
Vimos también varios arroyos. Me gusta mucho ver nacer el agua, que se hace paso en la tierra, que brota, fluye, se deja escurrir entre los recovecos que se va encontrando, serpentea y busca su curso, permitiendo la vida en los ecosistemas.

Finalmente, nos montamos nuestro propio comedor de cinco tenedores. No dudamos ni un momento en que preferíamos esto, a el mejor de los restaurantes de la zona. Encontramos en el placer que aporta a nuestros sentidos, la más mágica de las experiencias que te puede regalar la naturaleza. Integrarte , formar parte del lugar, disfrutar de los cantos de las aves, del sonido de las ramas de los árboles a merced del viento, las hojas secas cayendo y cubriendo el suelo, degustar la comida elegida, un postre delicioso, un buen libro y una siestecita, hasta que ¡empezó a tronar!, aún así, esto es para mí, la felicidad.

5 comentarios:

Alicia dijo...

Oh! Qué día de picnic más precioso! Y qué sitio elegistéis tan bonito! Parece de ensueño! :-) Besitos

Aniwiki dijo...

Está pendiente, pero gracias por recordarlo. Un saluwiki y feliz martes :)

Lorena dijo...

Alicia: Si es que vamos preparados para todo, jajajaja, y claro, así es fácil escoger el mejor de los sitios para comer, más en un parque tan bonito. Besets!
Aniwiki: Feliz martes a tí tmb, y feliz miércoles.

Alejandra dijo...

Las fotos son preciosas, seguro que os lo pasasteis de maravilla entre tanta naturaleza.
Besos a los dos.

Lorena dijo...

Alejandra: Desde luego, mal no estuvimos, jajajajaja. Besitos guapa!!